domingo, 5 de octubre de 2014

MIDIENDO EL PARO


Si hay un problema acuciante en la economía española, es el paro. Las estadísticas oficiales arrojan cifras escalofriantes que alarman a la opinión pública: un 25% de paro, seis millones de personas sin empleo, etc. Sin embargo, si queremos conocer bien la dimensión del problema es imprescindible tener unas nociones básicas sobre los instrumentos que se utilizan para medirlo. A eso dedicaremos la siguiente entrada.


¿Cómo podemos calcular las figuras que debemos incluir en la caja? Lo veremos en esta entrada.

El instrumento más utilizado para estudiar el estado de la fuerza de trabajo del país es la Encuesta de Población Activa (EPA), una encuesta realizada trimestralmente a unas 65.000 familias por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con distintas modificaciones, viene realizándose desde 1964 y responde a criterios estandarizados para la Unión Europea, por lo que sirve para comparar nuestra situación con la de muchos países de nuestro entorno.

Como su propio nombre indica, la EPA no es un censo ni un padrón, es una encuesta, por lo que existe un margen de error. Además, es una encuesta de hogares familiares, no de personas, por lo que excluye los datos relativos a aquellas personas que residan en viviendas colectivas (cuarteles, residencias, internados, etc.); por tanto, puede decirse que la EPA minusvalora la población española al no tener en cuenta a estas personas. En todo caso, el INE le atribuye unos márgenes de error muy ajustados (en torno al 2% para la medición de la población activa) y la mayor parte de los economistas confían en los datos de la EPA como en la imagen más fiel de la población activa de un país.

Ya he mencionado en un par de ocasiones el termino "población activa". En efecto, la EPA desagrega la población española en una serie de categorías atendiendo a la situación laboral de cada individuo. Veamos brevemente cuáles son estas categorías para conocer cómo se estudian los datos de empleo.

Población menor de 16 años: en España está prohibido que los menores de 16 años desarrollen cualquier tipo de trabajo (con excepciones muy concretas relacionadas con el mundo del espectáculo), por lo que estas personas no son tenidas en cuenta a la hora de calcular los porcentajes de parados y ocupados en España.

Población activa: está formada por las personas de 16 años o más incorporadas al mercado de trabajo. Es decir, incluye a las personas que están trabajando y a las que buscan trabajo. Conviene precisar que, mientras que el INE considera población activa a todas las personas de 16 o más años que reúnan estas características, Eurostat no tiene en cuenta a las personas mayores de 64 años (o la edad legal de jubilación), lo que introduce ligeras diferencias entre los datos de una y otra agencia.

  • Ocupados: son las personas que tienen un puesto de trabajo. Los trabajadores pueden serlo por cuenta propia o por cuenta ajena: en el primer caso, estaríamos hablando de empresarios autónomos, empleadores (con o sin trabajadores asalariados a su cargo) y cooperativistas o miembros de otras formas de economía social; en el segundo caso, estaríamos hablando de trabajadores del sector público o de la empresa privada. En todo caso, las posibilidades de clasificar a los trabajadores son ilimitadas, pudiendo distinguir entre trabajadores fijos o temporales, a tiempo completo o parcial, etc.
  • Parados: según la EPA, son parados las personas de 16 o más años que no tienen un puesto de trabajo pero que lo están buscando activamente y están disponibles para empezar a trabajar en un plazo de dos semanas. Al igual que los ocupados, los parados pueden subdividirse atendiendo a distintos criterios: si buscan su primer empleo o si ya han trabajado con anterioridad, si perciben prestaciones de desempleo o no, según la duración de la situación de desempleo, según la actividad profesional que desarrollaban antes de quedarse en paro, etc.

Población inactiva: según el INE, está integrada por las personas de 16 o más años no incluidas en ninguna de las categorías anteriores, lo que incluye a estudiantes, jubilados y pensionistas, personas dedicadas a las tareas del hogar, rentistas, incapacitados para realizar cualquier actividad, voluntariado que trabaja sin remuneración en actividades benéficas, personas que no tienen interés en estudiar ni en trabajar (los populares "ninis"), etc.

Para situar mejor estas categorías de población, veámoslas en el siguiente gráfico, en el que además se incluyen los datos relativos a la situación española en el segundo trimestre de 2014:



Datos relativos al segundo trimestre de 2014. Fuente: INE.